jueves, 5 de diciembre de 2019

Aplicar silicio en ají tabasco aumenta su rendimiento


Al aplicar altas concentraciones de dicho mineral durante los procesos de fertilización, las plantas y los frutos de ají tabasco crecieron más. El hallazgo beneficiará a los horticultores del Valle del Cauca, que con una producción promedio de 4.200 toneladas al año, es considerado el principal productor de este tipo de ají en Colombia.


Diana Carolina Legarda López, magíster en Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira, señala que en la actualidad el cultivo de ají tabasco representa un renglón agrícola importante en el país, ya que ha comenzado a expandirse en vista de su buena rentabilidad, producción y posibilidades de exportación.

Desde 2013, la producción de Capsicum frutescens, su nombre científico, ha sido priorizada como una de las principales hortalizas con oportunidades de corto y mediano plazo para acceder a los mercados internacionales, debido a la ratificación de los tratados de libre comercio vigentes con Estados Unidos y Europa.


Sin embargo el rendimiento del cultivo de ají y la calidad del fruto se han visto afectados especialmente por factores externos como las condiciones climáticas extremas, la reducida calidad del suelo y del agua, la técnica de producción y la alta incidencia de plagas y enfermedades como la provocada por el hongo Phytophthora capsici responsable del tizón y la marchitez, los cuales frenan el ingreso de los productores nacionales al mercado internacional.
En ese sentido, la investigadora señala que “aunque el silicio no se clasifica como un elemento esencial, sí es benéfico en la nutrición de las plantas”. Por ejemplo, su papel activo en la tolerancia a la sequía, en el aumento a la resistencia de la planta a plagas y enfermedades, y la mejora en la asimilación y transformación eficiente de nutrientes en el suelo, ha sido demostrada en cultivos como arroz, maíz, caña, papaya, fresa, café y algodón.
Por eso afirma que con su investigación se propuso determinar el efecto de la fertilización con silicio en el rendimiento y la calidad del fruto en el cultivo de ají.


Experimento en campo
El proyecto se realizó en el Campo Experimental de la UNAL Sede Palmira –corregimiento El Carmelo, municipio de Candelaria– utilizando semillas de ají tabasco procedentes del Programa de Mejoramiento Genético de Hortalizas de la Institución.
Se realizó un experimento con cinco tratamientos de fertilización que incluyen: nitrógeno (120 kg/ha), fósforo (60 kg/ha), potasio (120 kg/ha), calcio (42 kg/ha), magnesio (22 kg/ha), azufre (16 kg/ha), y silicio, el único nutriente que varió en su concentración.
Los cinco tratamientos evaluados con la aplicación de silicio fueron: nivel alto (3 litros/hectárea), nivel comercial (2,25 litros/hectárea), nivel medio (1,5 litros/hectárea), nivel bajo (0,75 litros/hectárea), y un testigo sin aplicación.


Entre los resultados, el rendimiento cuando se aplicó el nivel alto de silicio fue de 24.143 kilogramos/hectárea, mientras que el tratamiento sin aplicación de este mineral solo llegó a 21.143  kilogramos/hectárea, una diferencia de 3.000 kilogramos de ají Tabasco. 
Con respecto a la altura de la planta de ají tabasco, cuando estaba en su estado de desarrollo de floración, se encontró que aplicar alta dosis de -3 litros/ha de silicio influyó en una mayor altura, con una media de 71,81 cm, mientras que el testigo sin el mineral apenas tuvo un promedio de 56,64 cm.
En relación con el peso promedio del fruto, los mejores tratamientos fueron los niveles de silicio alto y comercial, con un promedio de 1,76 y 1,65 g/fruto respectivamente. 


En contraste, el menor fue el tratamiento cero silicio, con un peso promedio de 1,43 g/fruto de ají tabasco.
Finalmente, en la eficiencia agronómica –que permite conocer la capacidad del cultivo de ají tabasco para utilizar cada unidad adicional de silicio en el incremento del rendimiento del cultivo– se observó que el tratamiento con concentración alta del mineral alcanzó los 1.000 kg de fruto por cada kg de silicio aplicado al suelo.
La investigación de la magíster Legarda fue dirigida por el docente Mario Augusto Dávila, y codirigido por el profesor Carlos Iván Cardozo Conde, ambos de la UNAL Sede Palmira.

Fuente: Universidad Nacional - Colombia 

martes, 26 de noviembre de 2019

Melón sería más rentable con menos fertilización

Reducir en un 25 % el uso de fertilizante en este cultivo equivale a producir 68.906 kg/ha, con ingresos superiores a los 68 millones de pesos, mientras que aplicando el 100 % convencional, los ingresos no llegarían a 62 millones, aunque la producción sería de 88.026 kg/ha.

En Colombia 13 departamentos son productores melón
Así lo estableció Alejandro Bonilla Sánchez, magíster en Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira, en un experimento realizado con diferentes niveles de fertilización, cuyo objetivo era establecer un plan nutricional adecuado y rentable para el cultivo de melón en el territorio geográfico del río Cauca.

El estudio, además de determinar los requerimientos nutricionales y el comportamiento de absorción de elementos fundamentales (nitrógeno, fósforo, potasio, calcio y magnesio) en cultivos de melón, también buscaba beneficiar a pequeños agricultores mediante conocimientos y herramientas con respecto al aumento de la producción de frutos, y por ende de sus ingresos económicos.


El experimento se realizó en el municipio El Cerrito (Valle del Cauca) con base en un diseño de cinco tratamientos y cuatro repeticiones, para un total de 20 unidades experimentales de 3 x 4 m, con 25 plantas por unidad. En el primer tratamiento no se aplicó fertilización, en el segundo se utilizó la dosis recomendada comercialmente (100 %), en el tercero se aumentó 25 % de esa dosis, en el cuarto se disminuyó 25 % y en el quinto se disminuyó 50 %.

Aunque el Valle del Cauca es considerado como uno de los principales cultivadores de melón (Cucumis melo) y presenta los mayores rendimientos nacionales alcanzando las 30,06 ton/ha según cifras de 2019 del Ministerio de Agricultura, es importante complementar el desarrollo de variedades con programas de fertilización ajustados a cada variedad y para condiciones agroecológicas específicas en cada región.



Infortunadamente en la producción de melón en Colombia se viene excediendo la aplicación de fertilizantes, lo cual es ineficiente e insostenible, al extremo de que el “70 % de las aplicaciones de nitrógeno y el 75 % de fósforo se pierden al fijarse en el suelo”, según reportes de 2013 consultados por el investigador Bonilla.
Ante el panorama, el investigador estableció los niveles adecuados de fertilización mediante un análisis de absorción por parte de la planta, lo que contribuiría al desarrollo de programas de nutrición específicos para la variedad Challenger (evaluada en esta investigación) dentro de las condiciones de cultivo comercial del municipio de El Cerrito (Valle del Cauca).




Uso eficiente de nutrientes
En el estudio se determinó que el promedio para todos los tratamientos fue de 18 kg de fruto fresco por 1 kg de potasio; 23,3 kg de melón por 1 kg de nitrógeno; 160,9 kg por 1 kg de magnesio; 12,9 kg por 1 kg de fósforo; 11,2 kg por 1 kg de azufre; y 2 kg de melón por 1 kg de calcio.
En el tratamiento que se aplicó 25 % menos de fertilizante convencional, la eficiencia de utilización de cada uno de los nutrientes estuvo por encima del promedio, a excepción del nitrógeno. Por otra parte, a medida que se incrementan los niveles de nitrógeno, fósforo, potasio, calcio y magnesio, también aumenta el rendimiento del cultivo, aunque esto no significa que la rentabilidad sea mayor, pues intervienen otros costos como los asociados con el aumento de fertilizante.


En cuanto al espesor de la pulpa y la cáscara del fruto, estos no presentan diferencias muy significativas entre tratamientos, algo que sí ocurre con el peso del fruto, ya que con el tratamiento convencional más 25 % de la dosis de fertilizante alcanzó los 2,46 kg, mientras que el tratamiento con menos de 25 %, apenas llegó a 1,66 kg. Estos resultados, nuevamente, no se traducen en mayor rentabilidad, pues sigue siendo mejor para la economía de los agricultores aplicar 25 % menos del fertilizante.
De este modo, el tratamiento sin fertilización no tendría la capacidad de producir ni un solo fruto; el convencional produciría 88.026 kg/ha e ingresos por más de 61 millones de pesos; el convencional más 25 % alcanzaría 98.297 kg/ha con ingresos de 68,8 millones de pesos; el convencional menos 25 % obtendría 68.906 kg/ha e ingresos de poco menos de 69 millones de pesos; y el convencional menos el 50 % solo llegaría a 54.062 kg/ha con ingresos de 32 millones de pesos.
Se concluye, entonces, que en el tratamiento en que se disminuye el 25 % de fertilizante comercial es la mejor opción para los agricultores del municipio de El Cerrito (Valle del Cauca).

Fuente: Universidad Nacional -Palmira -colombia 

jueves, 14 de noviembre de 2019

Hongo letal, principal amenaza del banano Gros Michel en el Valle del Cauca


Buenas prácticas agrícolas, como cultivar el material vegetal registrado ante el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), ayudarían a los productores de banano Gros Michel en Sevilla, Caicedonia y Alcalá (Valle del Cauca- Colombia ) a combatir los efectos dañinos del hongo Fusarium oxysporum, causante de la marchitez, mal de Panamá o fusariosis.

Fusarium oxysporum le quita toda la vitalidad a las plantas de banano, volviéndose improductivas.


Diana Marcela Higuita Valencia, magíster en Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira, evidenció que en 19 de 33 fincas bananeras de dichos municipios vallecaucanos, Fusarium oxysporum, que ataca las raíces de las plantas, sigue siendo una de las principales preocupaciones de los productores de banano variedad Gros Michel.


A mediados del siglo XX dicho tipo de banano fue el más consumido en el mundo hasta que el devastador hongo lo dejó casi al borde la extinción. ¿Entonces por qué los agricultores del Valle del Cauca lo siguen cultivando? Los bananeros le contaron a la magíster que con Gros Michel tienen mejores ingresos, pues por su tamaño, aroma y sabor, es muy apetecido por los consumidores.


Según la investigadora, por esa razón centró su trabajo en corroborar la existencia de este hongo en los cultivos de la región a través de análisis de laboratorio y pruebas genéticas. Así, identificó la apariencia del microorganismo y realizó pruebas genéticas, comparando las 33 muestras tomadas del pseudotallo de las plantas colectadas en la zona de estudio con los datos almacenados en Genbank, el banco de datos de secuencias genéticas de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos.
Los resultados permiten afirmar que “la marchitez por Fusarium sigue siendo una de las enfermedades más limitantes en la producción de banano en los municipios donde se realizó el muestreo”, asegura la  magíster Higuita.
Alternativas de manejo
Además de la identificación de la presencia de Fusarium oxysporum en las plantaciones de banano Gros Michel en Sevilla, Caicedonia y Alcalá, la investigación también evidenció que las fincas evaluadas suelen usar más productos químicos para el control de enfermedades y menos estrategias agroecológicas.
Al respecto, señala que en los dos casos, los campesinos no cuentan con un sistema eficaz para erradicar los daños producidos por Fusarium oxysporum raza 1, la más conocida.
Agrega que los pequeños agricultores del Valle del Cauca que todavía persisten en su actividad de sembrar esta variedad de banano como acompañante del café, que es su cultivo principal, afrontan un problema de contaminación casi imposible de erradicar.
Además utilizan materiales de siembra de otras fincas sin tener en cuenta que la dispersión de esta enfermedad a través del movimiento de material vegetal contaminado es precisamente uno de los medios de propagación más importante del hongo.
Advierte además que “la dificultad en el control del hongo aumenta cuando los campesinos no utilizan material vegetal de viveros registrados por las autoridades fitosanitarias, en este caso del ICA”.
Ante ese panorama, surgió la variedad Cavendish, más pequeña, menos sabrosa, pero con la capacidad de resistir la infección de Fusarium oxysporum raza 1. No obstante, la reciente aparición de la raza 4 del hongo también pone en riesgo las plantaciones de banano Cavendish.


La recomendación primordial es “usar material de propagación procedente de viveros registrados ante el ICA, desinfectar las herramientas de trabajo y avisar a las autoridades fitosanitarias ante la presencia de síntomas desconocidos”, comenta la investigadora, y agrega que, según las encuestas, los campesinos confunden los síntomas del mal de Panamá con otras enfermedades o deficiencias nutricionales del cultivo.


Los hallazgos de este trabajo son relevantes si se tiene en cuenta que  
a pesar del ataque de Fusarium oxysporum, Colombia sigue siendo el cuarto exportador mundial de banano y que este ocupa el tercer renglón de las exportaciones del sector agrario en Colombia, después del café y las flores.

Fuente : Universidad Nacional-Palmira -Colombia 



lunes, 28 de octubre de 2019

¡Ácaros por montones en cultivos de aguacate!

Se identificaron alrededor de 46 especies distribuidas en 34 géneros que forman parte de 14 familias de estos arácnidos en los principales departamentos productores de Colombia, que representan nuevos reportes de especies relacionadas con este cultivo.

Anualmente el país produce más de 400.000 toneladas de aguacate de diversas variedades.

Este fue uno de los resultados de la tesis doctoral de la investigadora Yeimy García Valencia, doctora en Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira, quien realizó un trabajo inédito para Colombia, dirigido por la docente Nora Cristina Mesa Cobo y codirigido por el profesor Mario Augusto García Dávila.
Para el muestreo se tomaron hojas, ramas y frutos de aguacate en cultivos comerciales y no comerciales de los principales departamentos productores, como Antioquia, Bolívar, Caldas, Cauca, Cesar, Quindío, Huila, Risaralda, Santander, Tolima y Valle del Cauca.


Las muestras colectadas se llevaron al Laboratorio de Acarología de la UNAL Sede Palmira, donde se revisaron en un estereoscopio, instrumento que permite implementar técnicas de grabación de información visual en un plano tridimensional, y se realizaron los respectivos montajes en medio Hoyer, que consiste en introducir las muestras en una sustancia acuosa para su conservación y posterior análisis.
Después se realizaron las identificaciones taxonómicas de los ácaros hasta familias, géneros y especies. Para ello se utilizaron claves taxonómicas exclusivas para estos, una herramienta que permite identificarlos con base en las características visuales observables en microscopio.
Los mayores daños


Entre los hallazgos más relevantes se identificaron cuatro familias de ácaros fitófagos, es decir aquellos que se alimentan de materiales vegetales. Estas son las Eriophyidae, Tarsonemidae, Tenuipalpidae y Tetranychidae; esta última contiene a su vez cuatro especies de importancia económica que provocan daños en las hojas del cultivo de aguacate y que no se habían caracterizado antes en Colombia.
Tres de estas especies de ácaros: Allonychus reisi, Oligonychus yothersi y Oligonychus punicae, ubicados regularmente en el haz (cara superior) de las hojas, causan un broceamiento de estas cuando existen altas poblaciones. La cuarta especie, Eotetranychus tremae, se ubica en el envés (cara inferior) de las hojas y causa clorosis intervenal; cuando esto ocurre, las hojas se tornan de un verde pálido, amarillo o amarillo blanquecino.
“Los parámetros poblacionales de estas cuatro especies desarrolladas en hojas de aguacate variedad Lorena, muestran gran potencial reproductivo y capacidad de incrementar sus poblaciones en condiciones ambientales favorables”, apuntó la investigadora García, por lo que se puede inferir que posiblemente estas especies causarían afectaciones considerables en el cultivo.
De otro lado, también se identificó una gran diversidad de ácaros benéficos o depredadores –que se alimentan de otros ácaros– constituidas como ácaros especializados en regular las poblaciones dañinas para el cultivo de aguacate, un proceso que se conoce también como control biológico.


Algunos ejemplos de las familias depredadoras halladas son Phytoseiidae, Stigmaeidae, Cheyletidae, Cunaxidae, Bdellidae, Iolinidae y Ascidae.
La investigación colectó muestras de aguacate de variedades Lorena, Choquette, Samboni, Criollo, Marcus, Booth, Santana y Hass, entre otros. Específicamente en el cultivo de aguacate Hass, Colombia es considerado un productor de clase mundial.
Según el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, las cifras de 2019 reportan que cada año el país produce más de 400.000 toneladas de diversas variedades, lo que lo posiciona entre los cinco primeros lugares de producción del mundo. El aguacate Hass es el único que se exporta y se espera que en menos de dos años el país venda al exterior unos 100 millones de dólares en este producto, aseguró en su momento el ministro de Agricultura, Andrés Valencia.
Entre 2015 y 2017 las exportaciones de aguacate tuvieron un incremento del 413 %, al pasar de 10,3 a 52,9 millones de dólares, reportó MinAgricultura. Según las estimaciones de la Corporación de Productores y Exportadores de Aguacate Hass de Colombia, 2018 habría cerrado con un crecimiento del 37,73 %, que equivale a 73 millones de dólares.

Fuente: Universidad Nacional  



miércoles, 9 de octubre de 2019

Hongo protegería la papaya de la araña roja


Un hongo entomopatógeno (Isaria fumosorosea), que produce enfermedades letales en arácnidos, sería la mejor alternativa contra el ácaro Tetranychus urticae, plaga conocida como araña roja que reduce hasta en 50 % del rendimiento del cultivo si no se controla oportunamente.


El investigador evaluó tres extractos de origen vegetal, un aceite agrícola y el hongo mencionado, por medio de ensayos controlados en el Laboratorio de Acarología de la UNAL Sede Palmira y un yo en Roldanillo (Valle del Cauca), directamente con la papaya sembrada en el lugar.
La papaya ocupa el tercer lugar en demanda por los consumidores a nivel mundial. Se estima, según cifras de 2017 de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que existen aproximadamente 440.629 hectáreas sembradas en todo el planeta, 6.200 de las cuales están en Colombia .
Pruebas en laboratorio
En la investigación se utilizaron tres extractos de origen vegetal (ajo-ají, Sophora 1, Sopohora 2), un aceite agrícola (complejo mineral de ácidos grasos) y un hongo entomopatógeno (Isaria fumosorosea), causante de enfermedades en diversos insectos y ácaros.


El objetivo fue evaluar, en condiciones de laboratorio, cuál sería el porcentaje de eclosión de los huevos, el número de huevos colocados y el porcentaje de mortalidad en adultos de la araña roja.

Los efectos de dichos productos se compararon con los de los tres plaguicidas más utilizados en el Valle del Cauca en el cultivo de papaya (abamectina, spiromesifen, fenazaquin), lo que dio 9 tratamientos con 30 repeticiones, incluyendo un tratamiento testigo en el que se utilizó solo agua.
Entre los resultados más significativos se destaca que el tratamiento en el que se aplicó el hongo se presentó la mortalidad más alta de los huevos y adultos de la araña roja –85 y 81 % respectivamente– incluso por encima de los tratamientos con pesticidas. Esta misma tendencia se mantuvo frente a la eclosión y el número de huevos del ácaro. 

Efectos en el cultivo 
Para complementar la información obtenida y validar los resultados se diseñó un experimento en Roldanillo, para lo cual se evaluaron seis tratamientos aplicados al cultivo: un extracto de origen vegetal (ajo-ají), un complejo mineral de ácidos grasos, el hongo entomopatógeno, los agentes químicos (abamectina, spiromesifen, fenazaquin), un testigo control sin la aplicación de ningún compuesto, y un testigo agricultor (cultivo de papaya comercial en óptimas condiciones).


Los criterios de evaluación fueron la reducción de la población del ácaro, el número de hojas/planta, el diámetro del tallo, el número de flores/planta, el número de frutos/planta y el rendimiento del cultivo de papaya.



“En el tratamiento con el hongo entomopatógeno (I. fumosorosea) se encontró la menor población acumulada de araña roja (12.060 individuos) y no presentó diferencias significativas con el testigo agricultor y con el tratamiento químico”, concluyó el investigador Herrera.
En términos de rendimiento, el tratamiento con el hongo no presentó diferencias significativas con el testigo agricultor, mientras que en el tratamiento testigo control (sin ninguna aplicación), el rendimiento se redujo en cerca de un 33 %.



En el Valle del Cauca, la papaya alcanza una siembra de 700 hectáreas, posicionándose en sexto lugar como región productora de esta fruta tropical, teniendo en cuenta que en 2017 Colombia produjo 180.000 toneladas, con un rendimiento de 29 toneladas/hectárea.
Para incrementar esta producción, el investigador recomienda incorporar la alternativa del hongo entomopatógeno como agente de control en un sistema de manejo integrado.

Fuente Universidad Nacional de Colombia - Palmira 

martes, 1 de octubre de 2019

Ácaro reduciría hasta en 50 % rendimiento de la papaya

Papaya
La época crítica del ataque de la especie Tetranychus urticae en el cultivo va desde mitad de la etapa de floración hasta el llenado de fruto, ocasionando la drástica reducción del rendimiento del cultivo si no se maneja oportunamente.


Tetranychus urticae es una de las especies que más problemas ocasiona a la agricultura en el mundo.

Así lo estableció Yuri Mercedes Mena Pérez al evaluar el ataque del ácaro durante el desarrollo fenológico del cultivo de papaya en el municipio de Roldanillo (Valle del Cauca - Colombia )), como parte de su tesis del Doctorado en Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira, dirigida por la docente Nora Cristina Mesa Cobo.
“Aunque los daños de este ácaro y su afectación a los cultivos de papaya en el Valle del Cauca se han registrado desde hace mucho tiempo, no se han realizado suficientes estudios que demuestran el impacto de su ataque sobre la producción”, apuntó la investigadora Mena. 
Tampoco existen registros sobre la etapa fenológica del cultivo que más se afecta o si hay otras especies de ácaros fitófagos (que se alimentan de papaya) y depredadores que regulen los que son plaga.


Del mismo modo, con el fin de aportar conocimientos para el manejo de este ácaro fitófago, considerado como una plaga de alto impacto en el Valle del Cauca por ser causante de defoliación (caída prematura de las hojas de los árboles y plantas), se realizaron visitas en diferentes departamentos productores de Colombia para colectar hojas en cultivos comerciales y no comerciales.

A partir de la colección se identificaron diferentes especies de ácaros, entre los cuales las familias Tetranychidae (fitófagos) y Phytoseiidae (depredadores) presentaron la mayor diversidad y abundancia.
Producción de papaya en Colombia


Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en 2010 se registró una producción de más de 11 millones de toneladas, siendo los países más productores: 
India, Brasil, Indonesia, Nigeria, México, Etiopía, Colombia, Tailandia y Guatemala.
En la Encuesta Nacional Agropecuaria del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), en 2015 nuestro país produjo 105.459 toneladas de papaya, con rendimiento promedio de 29,7 ton/ha al año.
 Córdoba fue el principal productor, seguido de Valle del Cauca, Meta y Nariño.
En el caso del Valle, la investigadora encontró que el ácaro Tetranychus urticae estaba generando problemas, especialmente en la zona del municipio de Roldanillo.
 Normalmente los agricultores usan plaguicidas de síntesis química para el control, pero estos tienen repercusiones desfavorables en el cultivo: aumento en costos de producción, residuos tóxicos y calidad inferior del fruto.
En ese contexto, se realizaron experimentos en condiciones de campo con el cultivo de papaya (híbrido Tainung-1) en tratamientos que consistieron en la evaluación de diferentes etapas fenológicas con infestación del ácaro Tetranychus urticae.
Los resultados mostraron que “las poblaciones de Tetranychus urticae presentan un crecimiento exponencial desde mitad de la etapa de floración hasta el llenado de fruto, época considerada como crítica del ataque, explicó la investigadora.
Alternativas de manejo


Por último, la investigadora realizó la evaluación de depredadores (como los ácaros Phytoseiulus persimilis y Neoseiulus californicus, y el insecto Chrysoperla carnea) para combatir al ácaro Tetranychus urticae, es decir, establecer un control biológico sin la incorporación de plaguicidas.
Sin embargo los diferentes tratamientos no demostraron que los depredadores liberados ejercieran un control de las poblaciones de T. urticae: “posiblemente factores abióticos o bióticos no permitieron que se establecieran en el cultivo de papaya en las condiciones de prueba utilizadas, por lo cual se requieren de experimentos de verificación en los que se puedan mejorar las condiciones metodológicas”, dijo la investigadora Mena.
En esa medida, la tesis doctoral permitió desarrollar el trabajo de maestría “Evaluación de productos alternativos para el manejo de Tetranychus urticae”, de Ángel Mauricio Palacios, estudiante de la UNAL Sede Palmira, con el fin de seguir en la búsqueda de alternativas para proteger este cultivo.

Fuente : Universidad Nacional de Colombia - sede Palmira .

martes, 24 de septiembre de 2019

Galletas y pasteles a partir de almidón de papa nativa



La evaluación de la aptitud agroindustrial del almidón de papa nativa de
Nariño-(Colombia) ,determinó que es un ingrediente funcional para elaborar productos de panadería, lo que representa una oportunidad de crear alimentos con un valor agregado y una ventaja competitiva en la industria.

En este se identificó que algunas variedades de papas nativas de la región (Solanum phureja) se han perdido por su escasa demanda en el mercado, lo que trae como consecuencia una pérdida paulatina de la diversidad genética del recurso agrícola.

A raíz del problema, que se ha vuelto recurrente en Nariño, el proyecto justifica el rescate de estas variedades que exhiben características que se pueden aprovechar industrialmente para darle un valor agregado a este producto de importancia regional.


Hasta el momento se han evaluado más de 132 variedades nativas para determinar su comportamiento agronómico y sus potenciales usos.

 Para el caso específico de la caracterización de las variedades nativasconsiderando la extracción de almidón, la investigación de la estudiante Chaves mostró que algunas variedades de Solanum phureja tienen mayor contenido de este que las variedades de S. tuberosum (especie de papa que normalmente se comercializa en el mercado).



Con base en los datos obtenidos es posible concluir que ciertas variedades cuentan con una ventaja industrial por obtener mayores rendimientos en la extracción de este carbohidrato de alta demanda.

 Propiedades del almidón de papa
Durante el desarrollo del proyecto se estudiaron algunas aplicaciones alimentarias del almidón, estableciendo formulaciones en productos de panificación como galletas y pasteles, las cuales se trabajaron en conjunto con los agricultores.

El objetivo de esta investigación inédita es que los productos desarrollados se puedan extrapolar a un escenario real para su futura comercialización.
La metodología comprende la evaluación de propiedades fisicoquímicas y funcionales del almidón de papa nativa, como por ejemplo los índices de absorción de agua y de solubilidad en agua; la absorción de aceite; el poder de hinchamiento y emulsificante; y el contenido de amilosa y amilopectina, entre otras.


Los resultados han evidenciado diferencias con respecto a las propiedades del almidón de maíz (el más utilizado por la industria de panificación) que, según su aplicación, pueden representar ventajas tecnológicas y funcionales.
 En el caso de los productos de panificación, el almidón de papa es un potencial insumo para desarrollar productos sin gluten o con menor contenido de grasa.


Así mismo la metodología incluye el desarrollo del producto final, en el cual se evalúan las propiedades de la masa, el componente nutricional, las características físicas y químicas del producto, y por último la estimación de su vida útil y evaluación sensorial.

La escogencia del almidón de papa en productos de panificación responde a varios factores: primero, la industria es una de las más rentables, y aunque este es ligeramente más costoso que el de maíz, su inclusión en productos de panadería hace que sea un proceso económicamente viable para el aprovechamiento de la papa nativa.

Además los productos de panificación gozan de gran popularidad en el mercado gracias a su precio y facilidad tanto para el almacenamiento como para la comercialización.

Segundo, en el contexto nacional del cultivo, según el Ministerio de Agricultura, el consumo de papa en Colombia alcanzó en 2018 las 2.782 millones de toneladas en productos frescos y procesados, con un aumento de alrededor de 30.000 toneladas frente a las 2.751 millones consumidas en 2017.
En el sur del país el 20 % del área sembrada se concentró en Nariño, lo que convierte a este departamento en el tercero con mayor área sembrada después de Cundinamarca (37 %) y Boyacá .

“Investigaciones como esta representan un esfuerzo para preservar la riqueza genética de la papa y un gran avance, pues con los resultados no solo se espera desarrollar nuevos productos, sino que en un futuro esto pueda ser una idea de negocio que se lleve a la realidad”, concluye la investigadora Chaves.



lunes, 5 de agosto de 2019

Árbol de Macadamia y sus beneficios



El arbol de macadamia permanece siempre verde, alcanza 12 metros aproximadamente de altura , sus hojas son de forma lanceolada miden de 6 centímetro 30 , y de ancho 12 centímetros , sus flores varían , blancas rosadas..


Sus frutos de semillas comestibles , son leñosos y duros, de color verdosos, y su madurez cafe.



En la actualidad la macadamia se cultiva en México ,Bolivia, Colombia , Costa Rica, Guatemala Ecuador,Paraguay, República Dominicana, Paraguay, Venezuela y Madagascar. 

Sus bondades  o beneficios: 

 Su fruto que se encuentra por dentro sirve para la diabetes, hipertensión, triglicéridos y colesterol,  contiene Omega 3,6 y 9.


jueves, 13 de junio de 2019

Como cultivar plantas de flor sanas.

Cultivar plantas es con dedicación amor, y saber ubicarlas en sitios apropiados! 

Dar a una planta el tratamiento adecuado y las condiciones que ellas necesitan para que  las plantas se logren.


 Pero, aunque el tratamiento y las condiciones sean los más idóneos, si el ejemplar adquirido no es de buena calidad será muy fácil sacarla adelante. Una planta que sale de vivero donde a estado sometida a condiciones, casi ideales tiene muy pocas probabilidades de soportar bien las de una casa, que casi nunca le resultará tan propicias.


 Para lograr resultados plenamente satisfactorios es, pues, indispensable adquirir plantas sanas.
Las plantas en sus necesidades se asemejan a las personas, y es mucho más probable que respondan favorablemente a un tratamiento moderado que a uno excesivo .


Cualquiera de sus elementos que precisa una planta determina sus hojas, flores si se le proporciona adecuadamente. 
El agua, el calor , sol y  el abono, los cuidados excesivos son perjudiciales a la planta.
Lo mismo ocurre cuando se escatima con el agua y poco abono. La clave es pues la moderación .


Cambiar de tiesto cuando se salgan las raíces , al iniciarse el crecimiento activo.


 Hay plantas colgantes a las que se les debe mantener muy húmedas.



Hay quienes piensan que abonar una planta es como darle la medicina a un enfermo, eso es falso, es darles alimento para que se mantengan sanas y brillantes.
Las plantas de jardines son de mayor cuidado.

 Fuente:  Investiga PRO-AMBI.